El Hotel Bellevue es muy limpio y está en un edificio realmente bueno. La ubicación es céntrica, cerca de los tranvías, el centro de la ciudad y los museos. Hay un restaurante, Le Cap-Horn, a solo un minuto a pie del hotel, ideal para comer o cenar.

Podemos recomendar este hotel a todos, no tengo ninguna queja en absoluto, nos sentimos muy especiales. El hotel estaba muy limpio, el personal fue extra servicial y muy amable. Las habitaciones eran modernas y funcionales, con una cama cómoda.

No me gustó el personal, algunos eran poco amigables.

Personal muy servicial y ubicación cómoda en el viejo puerto. Comimos en Izee de por ahí. Habitaciones con una cama cómoda. El desayuno estaba incluido y tenía mucha variedad de comida;)))

Siempre vuelvo a este hotel porque el personal me ayudó mucho la primera vez al darme consejos sobre los taxis locales. Tiene todo lo que necesito: Wi-Fi, consigna de equipaje, seguridad las 24 horas y TV de pantalla plana. Volveré pronto.

Lo único que merece la pena es la ubicación, al lado del metro, el resto en línea con los hoteles de Francia, habitaciones pequeñas y cutres, y además en el caso de París, excesivamente caras.

La habitación era enana, con solo dos camas de matrimonio que tuvimos que compartir para una familia de 4. Además el hotel no tenía ascensor. La verdad que no puedo recomendar el hotel.

Estaba limpio.

El camarero durante el desayuno se mantuvo en el office. Nos pareció raro, aunque afortunadamente no necesitamos su servicio.

El hotel es precioso, el personal es excelente y amable. Las camas son cómodas y la habitación es espaciosa y funcional. Las vistas al patio son agradables. La ubicación es céntrica y está cerca de la estación, del viejo puerto, de tranvías y del centro de la ciudad.

Son gente muy amable y accesible, nuestro coche era demasiado grande para la plaza que teníamos y nos cedieron una plaza suya (privada). El hotel está a 10 minutos del ayuntamiento y de la calle principal de Brest. Las habitaciones son cómodas.

La habitación era espaciosa. Las dos primeros noches nos dejaron botellas de agua. Pese a tener garaje, el coche se puede aparcar en la parte trasera del hotel o en la cuesta cercana donde no hay que pagar.la dueña es extremadamente amable.

Siempre vuelvo a este hotel. La primera vez el personal me ayudó a encontrar el lugar que necesitaba. Es ideal para mí, tiene Wi-Fi, almacenamiento de equipaje, seguridad las 24 horas, televisión de pantalla plana. Volveré para Año Nuevo.

Las habitaciones eran amplias y confortables, propias de un 3 estrellas. Buena relacion calidad precio.

Habitación amplia con altillo para la cama de los niños.

Excesivo calor, nada de aire acondicionado. Desayuno sencillo. Hotel sin pretensiones, correcto sin más.

Este lugar es perfecto para explorar la ciudad. Es súper cómodo y acogedor. 🏨

Muy bien todo

Sólo la altura de la tv, había que mirar casi al techo para verla. Muy incómoda. Y el tamaño del baño, alguien con piernas largas, imposible de sentarse en servicio, ya que toca casi la pared

El hotel Bellevue en Brest es perfecto. La limpieza es impecable, la ubicación es súper céntrica y cerca del centro de la ciudad. Además, el trato personal es inmejorable. La dueña se preocupó por nosotros, nos consiguió una estufa eléctrica para el frío y nos permitió quedarnos más allá de la hora de salida para mi reunión de trabajo.

Recomendaría el lugar sin duda alguna.